¿Cuánto cloro se debe echar a una piscina para mantenerla?

El cloro es esencial para mantener el agua de la piscina limpia y segura. Actúa desinfectando el agua, eliminando bacterias, virus y algas que pueden proliferar en un ambiente acuático. Además, ayuda a mantener el agua clara y reduce la irritación de los ojos y la piel al equilibrar los agentes contaminantes que entran en el agua por el uso diario. A continuación, vamos a detallar cuál es la cantidad adecuada de cloro según qué piscina y cómo es el proceso paso a paso.

Factores que influyen en la cantidad de cloro necesario

A la hora de echar cloro a una piscina, no existe una cantidad estandar para todas las piscinas, sino que hay que tener en cuenta una serie de factores que determinarán la cantidad a echar:

Tamaño y volumen de la piscina

La cantidad de cloro necesario varía según el tamaño y el volumen de agua de la piscina. Para calcular la dosis adecuada, primero debes conocer los litros de agua que contiene tu piscina, lo cual puedes obtener multiplicando la longitud, ancho y profundidad promedio de la piscina y luego ajustar la cantidad de cloro en proporción a estos valores.

Uso frecuente y número de bañistas

Cuanto más uso tenga la piscina, mayor será la cantidad de cloro que necesitarás. Un número elevado de bañistas introduce más microorganismos y contaminantes al agua, lo que exige un mayor nivel de cloro para desinfectar eficazmente.

Condiciones climáticas y exposición al sol

La luz solar directa puede descomponer el cloro activo en la piscina, reduciendo su eficacia. Piscinas expuestas a mayor cantidad de sol necesitarán dosis más frecuentes o el uso de estabilizadores de cloro para mantener niveles adecuados.

Guía paso a paso para añadir cloro a tu piscina

A la hora de añadir cloro a la piscina, existe un protocolo que viene determinado por los siguientes factores a tener en cuenta:

Tipos de cloro disponibles para piscinas

Existen varios tipos de cloro en el mercado, como el cloro granulado, tabletas y líquido. Cada tipo tiene sus propias ventajas y modos de aplicación. Las tabletas son fáciles de usar y se disuelven lentamente, mientras que el cloro granulado es efectivo para tratamientos de choque.

Método correcto para añadir cloro

Siempre añade el cloro siguiendo las instrucciones del fabricante y con la bomba del filtro en funcionamiento para distribuirlo uniformemente. Para cloro granulado, disuélvelo primero en un cubo de agua y luego distribuye esta solución alrededor de los bordes de la piscina.

Precauciones de seguridad al manejar cloro

Mantenimiento regular y ajustes de cloro

Una vez que ya te hemos contado cómo añadir el cloro y la cantidad necesaria, es importante saber el mantenimiento regular que hay que hacer del agua cuando se aplican este tipo de productos. A continuación, te damos algunos consejos:

Consejos para ajustar los niveles de cloro según las necesidades

Realiza pruebas regulares del agua para monitorizar los niveles de cloro y ajusta las dosis según sea necesario. Los niveles ideales de cloro libre deben estar entre 1 y 3 ppm (partes por millón). Si los niveles caen por debajo de 1 ppm, es necesario añadir más cloro, mientras que niveles por encima de 3 ppm pueden ser demasiado altos y necesitar ajustes.

Consejos para el mantenimiento continuo del cloro en la piscina

Establece una rutina de mantenimiento que incluya la verificación del cloro al menos dos veces por semana en verano y una vez a la semana durante el invierno. Ajusta la frecuencia de adición de cloro basándote en el uso de la piscina, las condiciones climáticas y los resultados de las pruebas de agua. Según el tipo de piscina, recomendamos lo siguiente:

Piscinas residenciales (casas y pequeños hoteles):

Realiza pruebas de cloro dos veces por semana en épocas de uso intensivo (verano) y una vez por semana durante el invierno. Utiliza tabletas de cloro en flotadores o en skimmers para mantener un nivel constante, ajustando la cantidad según el uso y los resultados de las pruebas.

Piscinas de uso intensivo (hoteles grandes, gimnasios):

  • Prueba el cloro diariamente debido al alto número de bañistas y a la mayor carga orgánica.
  • Considera sistemas de dosificación automática de cloro para mantener niveles constantes sin necesidad de intervención manual constante.

Piscinas comunitarias en urbanizaciones:

Realiza pruebas al menos tres veces por semana, ajustando según el número de usuarios y las condiciones climáticas. Puede ser necesario aplicar tratamientos de choque con cloro granulado periódicamente para manejar mejor la carga orgánica y mantener el agua clara y segura.